Aunque aún quede por ahí más de uno que no termina de acostumbrarse a los smartphones y sus posibilidades, el avance tecnológico no conoce freno. Los móviles no van a dejar de existir y en el tejido empresarial empieza a ganar importancia una nueva manera de trabajar: el llamado Internet de las cosas.
¿Qué es el Internet de las cosas?
Aunque la denominación Internet de las cosas no es precisamente la más explicativa, lo cierto es que entender el funcionamiento de esta tecnología es bastante sencillo. La idea que subyace es algo tan simple como conectar un objeto o elemento a Internet. Ello no significa necesariamente que el objeto conectado vaya a contar con un navegador o una interfaz para que el usuario visite alguna página web, sino que el objeto va a ser capaz de conectarse a una red para transmitir por ella datos e información útiles.
¿Cómo se puede dejar notar el Internet de las cosas en el sector profesional? Pues, por ejemplo, podemos remitirnos al contenedor inteligente del cual hablamos hace escasos días y los sensores que incorpora. Al estar conectado a Internet podremos recibir datos e información en tiempo real y, en definitiva, llevar a cabo una mejor gestión y control de la carga que transporte este contenedor.
El Internet de las cosas revoluciona la logística
En el campo de la logística, el Internet de las cosas ha sido recibido con los brazos abiertos. Un estudio llevado a cabo por la firma DHL ha dejado de manifiesto que esta tecnología ocupa el tercer lugar en el ranking de innovaciones favoritas de los profesionales, únicamente por detrás del Big Data y la nube.
Esta tecnología ocupa el tercer lugar en el ranking de innovaciones favoritas de los profesionales
Las ventajas y nuevas soluciones que podremos encontrar de la mano de esta tecnología no son escasas y buena prueba de ello la encontramos con la proliferación de compañías dedicadas por completo a la aplicación del Internet de las cosas y sus posibilidades. Es el caso por ejemplo de la firma Sensing Assets, especializada en ofrecer soluciones para activos conectados IoT (Internet de las cosas) y Blockchain.
En cualquier caso, la mayoría de empresas del sector logístico ya dedica buena parte de su inversión a transformar procesos y hacerlos más sencillos de la mano del Internet de las Cosas. Este detalle no debe pasar desapercibido para España, pues es uno de los lugares donde el sector se encuentra más atomizado y dicha característica suele ser sinónimo de baja inversión.
Las empresas que pretendan ser competitivas de cara al futuro próximo deberán apostar claramente por el Internet de las cosas y esto significa inequívocamente un aporte de dinero. Los cambios van a ser numerosos y notables.
Cambios de la mano del Internet de las cosas
Las ventajas de la adopción del Internet de las cosas por las empresas logísticas podrán dejarse notar en cuatro grandes áreas:
Cadena de suministro
La incorporación del Internet de las cosas se dejará notar en la posibilidad de identificar y trazar todo el recorrido de una pieza a través de la cadena de montaje. Esto significa que se podrán limitar errores por falta de material, pero también que nos podremos olvidar de la aparición de cuellos de botella en el proceso, ya que el IoT permitirá tener mejor controlados los flujos de producción.
Almacenaje
Las mejoras que podemos esperar en el terreno del almacén pueden experimentarse desde el punto de vista del orden y reducción del error: la implementación de sensores permitirá identificar que la carga depositada en un lugar es la correcta y no otra, pero también desde el punto de vista de la seguridad. Equipar carretillas y métodos de transporte y elevación con sistemas de seguridad y prevención de accidentes también servirá para reducir la siniestralidad y mejorar la seguridad del trabajador.
Gestión de la flota
Coinciden los expertos en que esta será una de las áreas que más podría evolucionar de la mano del Internet de las cosas. La explicación puede residir en que, hasta ahora, la gestión de la flota era uno de los terrenos que tenía que lidiar con mayor incertidumbre. Si partimos de la base de que los sensores y tecnología van a reducir esa incertidumbre y van a permitir identificar las mejores rutas, conductores y soluciones para cada momento, las mejoras relativas a trazabilidad y visibilidad son sencillas de identificar.
Última milla
Un terreno donde la creatividad tendrá mucho que decir. Probablemente lo que hoy da más quebraderos de cabeza en esta área logística es todo lo relacionado con la entrega al cliente. Sin embargo, apostar por sensores y novedosos métodos de tecnología de entrega no solo permitirá mejorar la eficiencia del servicio logístico, sino que también mejorará la experiencia del cliente al poder controlar en todo momento la recepción de la mercancía.
El internet de las cosas revolucionará la logística
Aunque aún quede por ahí más de uno que no termina de acostumbrarse a los smartphones y sus posibilidades, el avance tecnológico no conoce freno. Los móviles no van a dejar de existir y en el tejido empresarial empieza a ganar importancia una nueva manera de trabajar: el llamado Internet de las cosas.
¿Qué es el Internet de las cosas?
Aunque la denominación Internet de las cosas no es precisamente la más explicativa, lo cierto es que entender el funcionamiento de esta tecnología es bastante sencillo. La idea que subyace es algo tan simple como conectar un objeto o elemento a Internet. Ello no significa necesariamente que el objeto conectado vaya a contar con un navegador o una interfaz para que el usuario visite alguna página web, sino que el objeto va a ser capaz de conectarse a una red para transmitir por ella datos e información útiles.
¿Cómo se puede dejar notar el Internet de las cosas en el sector profesional? Pues, por ejemplo, podemos remitirnos al contenedor inteligente del cual hablamos hace escasos días y los sensores que incorpora. Al estar conectado a Internet podremos recibir datos e información en tiempo real y, en definitiva, llevar a cabo una mejor gestión y control de la carga que transporte este contenedor.
El Internet de las cosas revoluciona la logística
En el campo de la logística, el Internet de las cosas ha sido recibido con los brazos abiertos. Un estudio llevado a cabo por la firma DHL ha dejado de manifiesto que esta tecnología ocupa el tercer lugar en el ranking de innovaciones favoritas de los profesionales, únicamente por detrás del Big Data y la nube.
Las ventajas y nuevas soluciones que podremos encontrar de la mano de esta tecnología no son escasas y buena prueba de ello la encontramos con la proliferación de compañías dedicadas por completo a la aplicación del Internet de las cosas y sus posibilidades. Es el caso por ejemplo de la firma Sensing Assets, especializada en ofrecer soluciones para activos conectados IoT (Internet de las cosas) y Blockchain.
En cualquier caso, la mayoría de empresas del sector logístico ya dedica buena parte de su inversión a transformar procesos y hacerlos más sencillos de la mano del Internet de las Cosas. Este detalle no debe pasar desapercibido para España, pues es uno de los lugares donde el sector se encuentra más atomizado y dicha característica suele ser sinónimo de baja inversión.
Las empresas que pretendan ser competitivas de cara al futuro próximo deberán apostar claramente por el Internet de las cosas y esto significa inequívocamente un aporte de dinero. Los cambios van a ser numerosos y notables.
Cambios de la mano del Internet de las cosas
Las ventajas de la adopción del Internet de las cosas por las empresas logísticas podrán dejarse notar en cuatro grandes áreas:
Cadena de suministro
La incorporación del Internet de las cosas se dejará notar en la posibilidad de identificar y trazar todo el recorrido de una pieza a través de la cadena de montaje. Esto significa que se podrán limitar errores por falta de material, pero también que nos podremos olvidar de la aparición de cuellos de botella en el proceso, ya que el IoT permitirá tener mejor controlados los flujos de producción.
Almacenaje
Las mejoras que podemos esperar en el terreno del almacén pueden experimentarse desde el punto de vista del orden y reducción del error: la implementación de sensores permitirá identificar que la carga depositada en un lugar es la correcta y no otra, pero también desde el punto de vista de la seguridad. Equipar carretillas y métodos de transporte y elevación con sistemas de seguridad y prevención de accidentes también servirá para reducir la siniestralidad y mejorar la seguridad del trabajador.
Gestión de la flota
Coinciden los expertos en que esta será una de las áreas que más podría evolucionar de la mano del Internet de las cosas. La explicación puede residir en que, hasta ahora, la gestión de la flota era uno de los terrenos que tenía que lidiar con mayor incertidumbre. Si partimos de la base de que los sensores y tecnología van a reducir esa incertidumbre y van a permitir identificar las mejores rutas, conductores y soluciones para cada momento, las mejoras relativas a trazabilidad y visibilidad son sencillas de identificar.
Última milla
Un terreno donde la creatividad tendrá mucho que decir. Probablemente lo que hoy da más quebraderos de cabeza en esta área logística es todo lo relacionado con la entrega al cliente. Sin embargo, apostar por sensores y novedosos métodos de tecnología de entrega no solo permitirá mejorar la eficiencia del servicio logístico, sino que también mejorará la experiencia del cliente al poder controlar en todo momento la recepción de la mercancía.