Pocos trabajadores quedarán en el sector de la logística que no hayan escuchado la sentencia de que el tiempo es oro. Sin embargo, conocer la importancia de este parámetro no significa conocer todas las fases del proceso en las que puede tener incidencia. En este artículo vamos a abordar los canales de aduanas en España y cómo hacer correctamente nuestro trabajo puede marcar la diferencia entre ganar tiempo y dinero o perderlo en grandes cantidades.
Aduanas en España: los controles
En el sector del comercio internacional, las aduanas juegan un rol protagonista e ineludible. Su función principal es la de actuar como un filtro de control, tanto para la importación como para la exportación de mercancías, así que todo lo que tenga que ver con legislaciones, controles y documentación relativa a nuestros envíos vivirá un momento sensible al momento de pasar por la aduana.
El representante aduanero es la figura encargada de ejercer el control y, por supuesto, de dar el visto bueno o retener la mercancía en cuestión. Si bien la mejor opción es contar con la mayor documentación posible para evitar retenciones o posibles investigaciones, existen tres documentos considerados esenciales para toda carga:
Documentos de embarque: Bill of Landing, Air Way Bill o CMR. Emitidos por la compañía encargada del transporte.
Packing list: Relación de datos relativos a la mercancía transportada.
Los 3 canales de aduanas en España
En función de si los documentos anteriores son correctos, están bien detallados o, por el contrario, cuentan con algún error o falta, nuestra mercancía va a seguir un camino u otro.
Si bien el representante aduanero es la máxima figura responsable en esta fase del proceso, lo cierto es que todo está informatizado y, una vez introduzca los datos en el sistema, nuestra carga será designada a un canal u otro.
Puede suceder lo siguiente:
Cargamento designado al canal verde: La mejor noticia posible, pues equivale a la autorización automática del levante de las mercancías y a que vamos a perder el menor tiempo posible.
Cargamento designado al canal naranja: El sistema ha detectado alguna irregularidad o disonancia informativa, por lo que se deberá proceder a la comprobación de todos los datos que figuran en la declaración y su concordancia con los documentos aportados. Si se logra realizar la comprobación y todo es correcto, se procederá al correspondiente levante.
Las importaciones que son exigidas de ir acompañadas de documentación especial (licencias de importación o ficha sanitaria) van por defecto a través del canal naranja.
Cargamento designado al canal rojo: El sistema ha encontrado errores en la documentación que acompaña la carga o existe algún motivo por el que se ha tomado la decisión de inspeccionar exhaustivamente el cargamento.
Despacho de aduanas en España: los “riesgos” del canal rojo
Llegados a este punto, resulta interesante detenerse para comprender bien lo que significa que nuestra carga sea destinada al canal rojo y todos los problemas que ello puede derivar. Lo primero a saber es que, antes de ser marcados para una inspección, los contenedores se encuentran habitualmente en el muelle, la zona en la que esperan hasta embarcar en el buque. Pero una vez que se ha decidido que un contenedor debe ser inspeccionado, este se debe llevar a un almacén especial, generando un coste adicional por el transporte.
Una vez en ese almacén, la inspección es normalmente realizada por tres personas: el despachante de aduanas, que comprueba realmente el trabajo que se realiza, un miembro de la guardia civil y un tercer profesional especialista en este tipo de inspecciones.
Durante la inspección habitualmente se tiene que abrir el contenedor y sacar algunos bultos para poder ver la mercancía correctamente. En ocasiones se puede llegar a tener que vaciar todo el contenedor, lo que significa que los responsables de la inspección tienen que entrar dentro del contenedor para sacar hasta el último bulto.
Si nos paramos a pensar en los sobrecostes que pueda terminar generando todo este proceso, es fácil que nos entre el miedo. En primer lugar, está la enorme cantidad de tiempo perdido por el transporte de la carga hasta el lugar de la inspección y el tiempo que requiere la misma, pero es que también tendremos que hacer frente a los costes adicionales derivados de esto. No hace falta pues ahondar en lo ruinoso que puede resultar en términos financieros el hecho de que nuestro cargamento termine frecuentemente en el canal rojo de aduanas en España.
¿Cómo evitar que nuestra mercancía acabe pasando por el canal rojo?
Lo cierto es que no hay ningún método infalible para evitar este «contratiempo». Pero lo cierto es que, si confiamos en los servicios de transitarios que dispongan de la certificación OEA (Operador Económico Autorizado), correremos un riesgo menor de pasar por dicho canal ya que la administración confía en la valía y profesionalidad del procedimiento, tanto del tipo de mercancía como de su correcta clasificación arancelaria, de alguien que disponga de dicha certificación.
Despacho de aduanas en España y los riesgos del canal rojo
Pocos trabajadores quedarán en el sector de la logística que no hayan escuchado la sentencia de que el tiempo es oro. Sin embargo, conocer la importancia de este parámetro no significa conocer todas las fases del proceso en las que puede tener incidencia. En este artículo vamos a abordar los canales de aduanas en España y cómo hacer correctamente nuestro trabajo puede marcar la diferencia entre ganar tiempo y dinero o perderlo en grandes cantidades.
Aduanas en España: los controles
En el sector del comercio internacional, las aduanas juegan un rol protagonista e ineludible. Su función principal es la de actuar como un filtro de control, tanto para la importación como para la exportación de mercancías, así que todo lo que tenga que ver con legislaciones, controles y documentación relativa a nuestros envíos vivirá un momento sensible al momento de pasar por la aduana.
El representante aduanero es la figura encargada de ejercer el control y, por supuesto, de dar el visto bueno o retener la mercancía en cuestión. Si bien la mejor opción es contar con la mayor documentación posible para evitar retenciones o posibles investigaciones, existen tres documentos considerados esenciales para toda carga:
Los 3 canales de aduanas en España
En función de si los documentos anteriores son correctos, están bien detallados o, por el contrario, cuentan con algún error o falta, nuestra mercancía va a seguir un camino u otro.
Si bien el representante aduanero es la máxima figura responsable en esta fase del proceso, lo cierto es que todo está informatizado y, una vez introduzca los datos en el sistema, nuestra carga será designada a un canal u otro.
Puede suceder lo siguiente:
Despacho de aduanas en España: los “riesgos” del canal rojo
Llegados a este punto, resulta interesante detenerse para comprender bien lo que significa que nuestra carga sea destinada al canal rojo y todos los problemas que ello puede derivar. Lo primero a saber es que, antes de ser marcados para una inspección, los contenedores se encuentran habitualmente en el muelle, la zona en la que esperan hasta embarcar en el buque. Pero una vez que se ha decidido que un contenedor debe ser inspeccionado, este se debe llevar a un almacén especial, generando un coste adicional por el transporte.
Una vez en ese almacén, la inspección es normalmente realizada por tres personas: el despachante de aduanas, que comprueba realmente el trabajo que se realiza, un miembro de la guardia civil y un tercer profesional especialista en este tipo de inspecciones.
Durante la inspección habitualmente se tiene que abrir el contenedor y sacar algunos bultos para poder ver la mercancía correctamente. En ocasiones se puede llegar a tener que vaciar todo el contenedor, lo que significa que los responsables de la inspección tienen que entrar dentro del contenedor para sacar hasta el último bulto.
Si nos paramos a pensar en los sobrecostes que pueda terminar generando todo este proceso, es fácil que nos entre el miedo. En primer lugar, está la enorme cantidad de tiempo perdido por el transporte de la carga hasta el lugar de la inspección y el tiempo que requiere la misma, pero es que también tendremos que hacer frente a los costes adicionales derivados de esto. No hace falta pues ahondar en lo ruinoso que puede resultar en términos financieros el hecho de que nuestro cargamento termine frecuentemente en el canal rojo de aduanas en España.
¿Cómo evitar que nuestra mercancía acabe pasando por el canal rojo?
Lo cierto es que no hay ningún método infalible para evitar este «contratiempo». Pero lo cierto es que, si confiamos en los servicios de transitarios que dispongan de la certificación OEA (Operador Económico Autorizado), correremos un riesgo menor de pasar por dicho canal ya que la administración confía en la valía y profesionalidad del procedimiento, tanto del tipo de mercancía como de su correcta clasificación arancelaria, de alguien que disponga de dicha certificación.