La apuesta por los vehículos híbridos y las energías renovables no se limita al sector de los particulares. De hecho, el mundo del transporte puede servir de banco de pruebas y convertirse en un terreno en el que el ahorro y la reducción de contaminación se conviertan en algo muy significativo. En Alemania tienen muy clara esta apuesta, prueba de ello son sus camiones híbridos y la autopista especialmente pensada para ellos.
Los camiones híbridos
Aunque la mayoría de mortales conoce de sobra los coches eléctricos, híbridos y autónomos, en lo relativo a los camiones existe un desconocimiento general. Quienes deseéis poner fin a esa ignorancia contáis con nuestro artículo sobre invertir en camiones eléctricos y las diferentes opciones que existen en el mercado. No será mala opción empezar a informarse cuando la apuesta de Alemania es especialmente convincente.
En el país germano los camiones híbridos se empiezan a perfilar como una de las mejores apuestas de futuro para el sector de los transportes. Estos vehículos incorporan dos sistemas de propulsión: un motor eléctrico acompañado de un motor diésel tradicional. Evidentemente la idea bajo la que funcionan estos vehículos es la de echar mano de la red eléctrica y reducir al máximo el uso de su motor diésel, sin embargo, la manera de obtener electricidad es algo diferente a lo que estamos acostumbrados a ver.
Básicamente, estos camiones híbridos incorporan en su parte superior un pantógrafo eléctrico, muy similar al de los trenes de toda la vida, capaz de interactuar con las líneas eléctricas y realizar un intercambio de energía. Este pantógrafo es además ‘inteligente’, por lo que la alternancia entre motores se produce de forma automática y sin que el conductor deba despistar su atención para activarlo.
¿Cuál es el único ‘pero’ a todo esto? Pues que, para poder sacarle rendimiento a los camiones híbridos, necesitamos contar con autopistas eléctricas preparadas para ello. De momento el terreno está muy verde, aunque desde Siemens ya han comenzado a poner su granito de arena para dar un buen impulso a la idea.
La Ehighway de Siemens
Gracias a la iniciativa de la compañía Siemens, Alemania ya puede presumir de una autopista eléctrica que permite a los camiones utilizar energía eléctrica de catenarias en un tramo de 10 kilómetros. Para más señas, hablamos de la autopista A5 a su paso por las localidades de Langen y Weiterstadt.
Aunque este pequeño tramo se podría entender como una prueba experimental (algo que Siemens lleva ya años haciendo en tramos de carretera privada), lo cierto es que desde el Gobierno alemán están encantados con la iniciativa y ya cuentan con planes para transformar en autopista eléctrica otros tramos del país.
Beneficios e inconvenientes de apostar por los camiones híbridos
Rita SchwarzelührSutter, la secretaria de Estado del ministerio de Medioambiente, ha declarado que “los camiones híbridos son una solución particularmente eficiente en el camino hacia un transporte sin emisiones de carbono”. Evidentemente, estamos hablando de un paso adelante en lo relativo a mejorar eficiencia y reducir emisiones, pero no estamos hablando exclusivamente de ventajas.
Ventajas
Las ventajas de la autopista eléctrica están capitaneadas por el ahorro, tanto en términos económicos como en términos de emisiones contaminantes. Dicen los expertos que gracias a ella vamos a lograr reducir notablemente las emisiones de CO2 y óxido de nitrógeno, pero además destacan un teórico ahorro de 20.000 euros para cada transportista que cubra 100.000 kilómetros en este tipo de autopista.
También es interesante destacar que la transformación o adaptación de una autopista corriente a autopista eléctrica no conlleva que el tráfico pase a ser exclusivo de camiones híbridos, sino que pueden convivir el tráfico tradicional y el tráfico híbrido, logrando así que el impacto de transformación sea mínimo.
Desventajas
Y una vez abordadas las ventajas, que no son pocas ni intrascendentes, también nos toca afrontar la carga negativa de apostar por la autopista eléctrica. Para empezar, hay que mencionar el coste: adaptar cada kilómetro a esta novedosa autopista cuesta en torno a 2 millones de euros, una cantidad cuanto menos significativa.
Otro inconveniente a tener en cuenta es la necesidad de que la carretera se encuentre liberada verticalmente, por aquello de poder instalar el tendido eléctrico. Esto puede suponer un sobrecoste al ya alto requerimiento de adaptación. La última desventaja actual a la que las Ehighway deberán buscar solución es la limitación a 90Km/h para el tráfico de camiones, pues en determinados tramos los conductores deberán contar con mayor velocidad si no quieren perder la eficiencia ganada