Si bien la adopción del transporte sostenible en el sector marítimo, ha ido creciendo en los últimos años, todavía falta mucho por hacer. De hecho, todavía no se puede decir que el envío internacional sea realmente sostenible.
Pero en la actualidad, es una obligación realizar cambios, para poder cumplir con las nuevas regulaciones y tecnologías. Y no solo eso, el consumidor final también entiende cada vez más el impacto de la contaminación en el ser humano y el medio ambiente.
¿En qué consiste el transporte sostenible?
De acuerdo con la Cámara Internacional de Transporte Marítimo, y la Organización Marítima Internacional, la flota mercante es responsable del 3% de todas las emisiones mundiales de dióxido de carbono.
Esto equivale a las emisiones anuales de un solo país desarrollado, como el caso de Alemania. Más importante aún, si no se hace nada al respecto, estas emisiones representarán alrededor del 17% de las emisiones de CO2 en el año 2050.
Por lo tanto, es evidente la importancia del transporte sostenible. Pero para ello primero hay que entender, que el transporte ecológico es el concepto de desarrollo sostenible aplicado al sector del transporte marítimo.
En dicho concepto se incorpora la responsabilidad ambiental y social. Sin embargo, y de acuerdo con un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, la descarbonización total en el transporte marítimo será posible en el año 2035.
No obstante, para que esto suceda, las siguientes condiciones son fundamentales:
Medidas tecnológicas. Implementadas a través de la mejora de la eficiencia energética y el almacenamiento.
Medidas operativas. Como la reducción de la velocidad de las embarcaciones.
Energías renovables. A través del desarrollo y el uso de biocombustibles o energía eólica.
¿Cuáles son los desafíos para la industria marítima?
Evidentemente la naturaleza de la industria marítima está cambiando, y hay muchos problemas que podrían desencadenar interrupciones no deseadas. Sin embargo, también es un hecho que pueden existir oportunidades para aquellos que estén mejor preparados.
Por lo tanto, se vuelve muy importante observar el mercado, los desafíos tecnológicos y regulatorios, así como las oportunidades para ofrecer un envío apto para el futuro.
En consecuencia, son varios los desafíos que enfrenta la industria marítima en términos del transporte sostenible. No obstante, se puede conseguir a través de operaciones y tecnologías más eficientes, en áreas como las siguientes:
El diseño de barcos ecológicos eficientes, hélices, motores, así como formas de casco y revestimientos mejor diseñados.
También se puede alcanzar un transporte sostenible en la industria marítima, optimizando la velocidad, así como los sistemas de enrutamiento meteorológico.
Un cambio en el uso de combustibles fuelóleos pesados por gas natural, celdas de combustible o biocombustibles.
Igualmente a través del desarrollo de soluciones hibridas, sistemas de baterías, así como electrificación de embarcaciones.
Una mejora en la infraestructura para permitir tiempos de respuesta mucho más rápidos. Incluso incrementar la capacidad del puerto.
El uso de tecnologías de maduración en depuradores, así como la recirculación de gases de escape.
Utilización de sensores, big data, además de una dinámica de fluidos computacional, y también sistemas de gestión del rendimiento.
Las regulaciones impulsarán el transporte sostenible
Particularmente las acciones tomadas ya por la Organización Marítima Internacional, para limitar y reducir las emisiones al aire y al mar. Es decir, este tipo de controles en la industria se intensificarán en los próximos años, a medida que más regulaciones sean implementadas.
Pero además de las regulaciones sobre emisiones contaminantes, también es probable que otras partes interesadas.
Los banqueros, fletadores, inversores y compañías de seguros, igualmente establezcan requisitos más estrictos para mejorar la eficiencia energética y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Sin embargo, aunque las regulaciones internacionales respecto a la contaminación, son algo necesario, dichas regulaciones también deben ser sensibles a su impacto financiero.
Por lo tanto, es importante que se trabaje con la industria para encontrar soluciones viables, que además fomenten la inversión en prácticas sostenibles.
Lo que queda por hacer
Evidentemente se necesita hacer más para que el transporte en la industria marítima sea realmente sostenible. Pero no hay que perder de vista que alentar a la industria para realizar cambios, debe ir acompañado de algo atractivo.
Es decir, también se debe indicar qué oportunidades y soluciones ofrecen estos cambios. Además, mencionar cómo pueden estos cambios ayudar a fortalecer la posición de una empresa en el mercado, e incluso crear valor para la sociedad.
En consecuencia, si deseamos encontrar respuestas a los desafíos del transporte sostenible, solo será posible mediante un intercambio de ideas más profundo.
Obviamente, este dialogo tiene que darse entre los operadores, los reguladores, así como con la sociedad en general.
De hecho, todo mundo debe enfrentar los desafíos, así como trabajar de manera colaborativa y estratégica, con el objetivo de proporcionar la tecnología y soluciones que en realidad conduzcan a una industria marítima más sostenible.
Por supuesto esto también significa que se necesitan compañías que estén pensando y actuando de manera sostenible.
Transporte sostenible: Moviendo el comercio global de una forma más verde
Si bien la adopción del transporte sostenible en el sector marítimo, ha ido creciendo en los últimos años, todavía falta mucho por hacer. De hecho, todavía no se puede decir que el envío internacional sea realmente sostenible.
Pero en la actualidad, es una obligación realizar cambios, para poder cumplir con las nuevas regulaciones y tecnologías. Y no solo eso, el consumidor final también entiende cada vez más el impacto de la contaminación en el ser humano y el medio ambiente.
¿En qué consiste el transporte sostenible?
De acuerdo con la Cámara Internacional de Transporte Marítimo, y la Organización Marítima Internacional, la flota mercante es responsable del 3% de todas las emisiones mundiales de dióxido de carbono.
Esto equivale a las emisiones anuales de un solo país desarrollado, como el caso de Alemania. Más importante aún, si no se hace nada al respecto, estas emisiones representarán alrededor del 17% de las emisiones de CO2 en el año 2050.
Por lo tanto, es evidente la importancia del transporte sostenible. Pero para ello primero hay que entender, que el transporte ecológico es el concepto de desarrollo sostenible aplicado al sector del transporte marítimo.
En dicho concepto se incorpora la responsabilidad ambiental y social. Sin embargo, y de acuerdo con un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, la descarbonización total en el transporte marítimo será posible en el año 2035.
No obstante, para que esto suceda, las siguientes condiciones son fundamentales:
¿Cuáles son los desafíos para la industria marítima?
Evidentemente la naturaleza de la industria marítima está cambiando, y hay muchos problemas que podrían desencadenar interrupciones no deseadas. Sin embargo, también es un hecho que pueden existir oportunidades para aquellos que estén mejor preparados.
Por lo tanto, se vuelve muy importante observar el mercado, los desafíos tecnológicos y regulatorios, así como las oportunidades para ofrecer un envío apto para el futuro.
En consecuencia, son varios los desafíos que enfrenta la industria marítima en términos del transporte sostenible. No obstante, se puede conseguir a través de operaciones y tecnologías más eficientes, en áreas como las siguientes:
Las regulaciones impulsarán el transporte sostenible
Particularmente las acciones tomadas ya por la Organización Marítima Internacional, para limitar y reducir las emisiones al aire y al mar. Es decir, este tipo de controles en la industria se intensificarán en los próximos años, a medida que más regulaciones sean implementadas.
Pero además de las regulaciones sobre emisiones contaminantes, también es probable que otras partes interesadas.
Los banqueros, fletadores, inversores y compañías de seguros, igualmente establezcan requisitos más estrictos para mejorar la eficiencia energética y reducir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Sin embargo, aunque las regulaciones internacionales respecto a la contaminación, son algo necesario, dichas regulaciones también deben ser sensibles a su impacto financiero.
Por lo tanto, es importante que se trabaje con la industria para encontrar soluciones viables, que además fomenten la inversión en prácticas sostenibles.
Lo que queda por hacer
Evidentemente se necesita hacer más para que el transporte en la industria marítima sea realmente sostenible. Pero no hay que perder de vista que alentar a la industria para realizar cambios, debe ir acompañado de algo atractivo.
Es decir, también se debe indicar qué oportunidades y soluciones ofrecen estos cambios. Además, mencionar cómo pueden estos cambios ayudar a fortalecer la posición de una empresa en el mercado, e incluso crear valor para la sociedad.
En consecuencia, si deseamos encontrar respuestas a los desafíos del transporte sostenible, solo será posible mediante un intercambio de ideas más profundo.
Obviamente, este dialogo tiene que darse entre los operadores, los reguladores, así como con la sociedad en general.
De hecho, todo mundo debe enfrentar los desafíos, así como trabajar de manera colaborativa y estratégica, con el objetivo de proporcionar la tecnología y soluciones que en realidad conduzcan a una industria marítima más sostenible.
Por supuesto esto también significa que se necesitan compañías que estén pensando y actuando de manera sostenible.